Mi mundo asiático

Las pocas personas que me conocen de verdad saben que realmente me gusta mucho el pop, aunque parezca raro ya que otras personas en mi vida me han visto cantar canciones de Slipknot y ponerme loca con Rammstein.

Sin embargo, parte de mi creció escuchando música pop, por ende me ha gustado mucho todas sus fusiones y jamás discrimino una canción venga de donde venga, esto lo digo por que una vez una amiga escucho una buena canción que adoraba, pero al enterarse que lo cantaba un grupo de chicos que se creen de la cultura punk y no saben otra cosa que teñirse el cabello de morado, le dejo de gustar y hasta creo que la odio.

A mi no me importa si ese grupo tonto canta la canción que me gusta, porque al final la música es música, aunque aveces soy muy extraña ya que por alguna razón no soporto a Paul Mccartney, amo a los Beatles, son mega fan de Lennon, pero ahora que este inglesito viene a Lima, dudo mucho que aunque tenga dinero iría a verlo.

Regresando al tema, hay un grupo de chicas coreanas, un grupo de chicos japoneses que realmente me gustan, su música y ellos, porque los asiáticos siempre me parecieron curiosos y adorables.

Las personas me ven extraño cuando hablo de esos grupos, es que realmente me encantan, quizás es porque son diferentes a nosotros, se ven hasta más educados y desde hace mucho los he admirado.

Estoy segura que todos han tenido algo de asiático en sus vidas, Candy, Dragon Ball, Sailon Moon, todo viene de japón y los que realmente nos quedamos enganchados buscamos más y más animes.

No me considero una persona que sabe mucho sobre los animes, el jpop, jrock, kpop o krock, realmente se muy poco, pero lo que sé me gusta y mucho, es por eso que digo con mucho orgullo que tengo un mundo asiático dentro de mi cuarto y mi corazón y aunque tenga 50 años creo que lo tendré, y aunque según algunas personas me haga más friki, es mi mundo y me encanta.

Adoro a SNSD, gracias amigo Miguel por enseñarmelas, y a Arashi, sus letras me cautivaron y ayudaron en momentos de mi vida, gracias Andrea por contagiarme tu pasión por ellos.